PUEBLO DE NAVIDAD

El clima tropical de Trinidad y Tobago hace que las vacaciones sean cálidas y soleadas, pero eso no impide que sus ciudadanos se contagien del espíritu navideño.

Muchas familias cuelgan luces de Navidad por toda la casa para prepararse para estas emocionantes fiestas. Algunas casas tienen extravagantes luces parpadeantes que cubren sus tejados y patios delanteros, con la esperanza de entretener a los transeúntes. Muchos trinitenses también aprovechan las fiestas para retocar sus casas con pintura o electrodomésticos nuevos.

En las semanas previas a la Navidad, la radio pone sin parar música "Parang", una mezcla de música navideña venezolana y trinitense cantada en español. Los rasgueos de las guitarras y los alegres violines se mezclan con las maracas para levantar el ánimo de todos. "Soca-Parang", que se canta en inglés, lleva un ritmo tropical y alegre mientras canta sobre la diversión navideña.

El día de Navidad, la mayoría de la gente se queda en casa con sus familias, pero muchos viajan de casa en casa, disfrutando de deliciosa comida y riendo con los amigos. Las comidas navideñas se preparan durante todas las fiestas, no sólo el día de Navidad. De hecho, los trinitenses remojan las frutas en vino de cereza, jerez y ron durante varios meses para hornear su delicioso pastel de frutas navideño. ¿Qué más hay en el menú? Jamón, pavo, pan casero y pasteles (tamales). Las bebidas festivas incluyen ponche-de-creme (ponche de huevo), acedera (bebida elaborada con pétalos de acedera, una flor parecida al hibisco), cerveza de jengibre y vino local. Las familias se reúnen alrededor de la mesa para jugar, compartir pequeños regalos y recordar viejos tiempos.

En Trinidad y Tobago, la Navidad consiste en compartir la alegría y el consuelo a través de comidas cuidadosamente cocinadas y la insustituible sensación de disfrutar de la compañía de los seres queridos.